En el capítulo 7 del libro de ensayos de Chuck Klosterman 'Sex, Drugs and Cocoa Puffs' hay una explicación bastante original de por qué el fútbol triunfa en los Estados Unidos entre los más jóvenes y después no lo juega nadie. Resumiendo: es el deporte perfecto para que los más torpes jueguen a algo, pasen desapercibidos y sus padres estén más o menos orgullosos, ya que no hay nada más fácil que 'esconderse' entre diez jugadores de campo.
Visto como su selección no acaba de dar el salto cada vez me la creo más.
Contra letal de Brasil, gol de Robinho.
Jugada de toque, doble pared y remate de Maicon.
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